Ya se estrenó en el país Hojas de Otoño, película de Aki Kaurismäki que ganó el Premio del Jurado en el último Festival de Cannes y que se encuentra en el top 10 de los mejores filmes del año, según Cahiers du Cinéma.
Por Denise
Pieniazek
La película Hojas de Otoño (Kuolleet Lehdet, 2023) escrita y dirigida por el
finlandés Aki Kaurismäki -El otro lado de la
esperanza (2017), El puerto (2011), El hombre sin pasado (2002),
La vida bohemia (1992)-, narra la historia de amor entre dos personas
solitarias y austeras que viven en Helsinki. Ansa (Alma Pöysti) es una mujer
que trabaja como empleada en un supermercado, mientras que Holappa (Jussi Vatanen)
es un obrero. Ambos se la rebuscan para sobrevivir y lograr un sustento. Azarosamente
se conocen en un Karaoke, en una noche de ocio.
Digamos que a partir de ese
“amor a primera vista”, el filme esboza la idea de que la clase trabajadora
también tiene derecho a enamorarse. Porque el cine de Kaurismäki nunca se olvida de las
clases sociales más golpeadas. Sus relatos suceden con frecuencia en Helsinki o
en otras locaciones de la Europa nórdica. Uno de los aspectos más interesantes
del largometraje es que su ambientación “engaña” al espectador haciéndole creer
que el relato está ambientado unas décadas atrás, previo a la era de la “hiper-imagen”.
Sin embargo, un almanaque y las noticias en la radio sobre la guerra entre
Ucrania y Rusia, anclan el contexto a la actualidad. Es decir, que su decorado,
utilería y estética vintage transmiten cierta idea de atemporalidad.
El romance entre Ansa y
Holappa, está lleno de encuentros y desencuentros, que, como es propio del
realizador, se toman su tiempo. La dosificación de la información de la vida de
cada uno de los protagonistas se va entregando al espectador de forma
paulatina, manteniendo la intriga. Esta historia de amor, podría catalogarse
como un “drama de enredos” (en oposición a la tradicional “comedia de enredos”
norteamericana), si bien posee algunos destellos de comicidad. A pesar del
elemento de azar inicial, lo cierto es que los protagonistas se esfuerzan por
lograr nuevos encuentros pese a los infortunios, intentando ser dueños de su
propio destino.
Un aspecto interesante es la
representación del personaje de Ansa, una mujer que no quiere repetir patrones,
que elige su bienestar por encima de todo. No desea tener un hombre en su vida
con los mismos problemas que padeció de su padre. Ante la frustración amorosa y
la búsqueda de compañía, la protagonista adopta un perro. Esto nos permite
reflexionar sobre esta cuestión presente en la posmodernidad: la creciente
elección de mascotas por parte de personas solitarias. Al parecer, es más fácil
vincularse con un animal incondicional que con un ser humano. Porque como
enuncia la amiga de la protagonista: “Todos los hombres salen del mismo
molde, lamentablemente está roto”.
Asimismo, las ideas que se
esbozan en torno a lo desechable y descartable en el filme, ya sea la mano de
obra o los alimentos. Varias escenas del supermercado donde trabaja Ansa
reflejan esto, en relación al descarte innecesario de alimentos. Estos
conceptos sobre los que se supone es un “desperdicio” es algo que ha esbozado
de forma brillante Agnès Varda en su documental Los espigadores y la
espigadora (2000).
Por último, Hojas de Otoño posee en líneas generales un tono
nostálgico, desde su ambientación vintage, su variada elección musical hasta la
cantidad de relaciones intertextuales con otras películas, que se destacan en
la sala de cine donde transcurren algunas escenas, ya sea en la pantalla con Los
muertos no mueren (2019, Jim
Jarmusch) o en las marquesinas del mismo y los posters de filmes de Bresson,
Godard, Visconti, entre otros. En adición, la canción “Bajo el serbal de otoño”
que suena mientras los protagonistas se conocen, alude al título de la obra (Kuolleet Lehdet/hojas muertas)
después de todo qué es más melancólico que el otoño. Asimismo, forma parte del
soundtrack “Arrabal
amargo” de Carlos Gardel, género musical melancólico por excelencia. Incluso,
hay otro guiño que los argentinos adorarán, otra escena transcurre en un bar que
lleva el nombre de “Buenos Aires”.
En
conclusión, Kaurismäki
entrega una simple pero profunda historia que nos recuerda que ser austero aún
es posible. Según los personajes lo elemental para ser feliz, es tener un
techo, comida, un perro y amor de pareja… ah y el arte, ya sea a través de una pantalla
de cine o de un parlante.
Ficha
Técnica:
Título original: Kuolleet Lehdet.
Año: 2023.
País: Finlandia.
Dirección: Aki Kaurismäki.
Guión: Aki Kaurismäki.
Elenco: Alma Pöysti, Jussi Vatanen, Janne Hyytiainen y
Nuppu Koiua.
Dirección de fotografía: Timo Salminen.
Dirección de Arte: Ville Grönroos.
Producción: Aki Kaurismäki.
Duración: 83
minutos.
Fecha de estreno comercial en
Argentina: 30 de noviembre de 2023.
Disponible en MUBI desde el 7 de diciembre de 2023, junto a “El Arte de Ser Humano: Películas de Kaurismäki”, una retrospectiva de la obra del director finlandés, uno de los más destacados del cine europeo contemporáneo, con más de 20 títulos.
Trailer: https://www.youtube.com/watch?v=d8xG7VLzv98
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