"Tan fuerte y tan cerca" o cuando el melodrama es muy mediocre

 

El film de Stephen Daldry es una indigerible suma de golpes bajos y manipulaciones que lo vuelven insoportable

por Andrea Migliani

Stephen Daldry no alcanzó aquí la concentración de narración y acción que en The Reader le valió tantos  elogios. El director de películas memorables como Billy Elliot Las horas, maravilla de concatenación rizomática, cayó en un pozo sin salida en la que el golpe bajo, la manipulación artera y todos los lugares comunes de la tragedia remanida, que justamente resta tragicidad, se reúnen en  Tan fuerte y tan cerca.

La historia es la de Oskar Shell, encarnado por Thomas Horn, un niñito precoz, sabiondo y curioso que pierde a su padre, Tom Hanks, en el atentado de las Torres Gemelas. Todavía deberemos digerir más remezones de aquella espantosa situación -que justamente por tremenda es inenarrable- hasta que vuelva la guerra fría o haya una bandada de abejas asesinas o retorne el hijo de King Kong.

El pequeño, insoportable si los hay, y esto es importante porque si es el héroe y no genera empatía estamos en mala senda, queda al cuidado de su mamá, Sandra Bullock. Encuentra una llave que tenía su padre y este hecho lo lanzará a la búsqueda de su dueño. ¿Qué puede abrir esa llave? Suspenso, intriga y más golpes bajos desde la voz del contestador en el que Hanks habla antes de que las torres se derritan, una y otra vez, una y otra vez.

A esta serie tremenda de tribulaciones hay que agregar que su compañero de búsqueda, epifanía o aventuras es su abuelo, Max Von Sidow que, sólo casualmente, es un sobreviviente de un campo de exterminio nazi. Yo aquí ya tiro la toalla.

Como la búsqueda es incesante y es en la vertiginosa New York, el pequeño se topará con variopintos personajes que prestan atención a su historia, su abuelo mudo, sólo acompaña. Entonces en un poco más de dos horas Daldry nos  trata de manejar con toda esa sumatoria de efectos del melos y la tragedia, expuestos, exuberantes, insoportablemente artificiosos como si una historia particular no mereciera un clima más íntimo. La orfandad, el horror y la violencia que dan pié a esta historia merecían más respeto.

En fin, parece que cuando algunos se afincan en Hollywood pierden el criterio estético y peor aún, una ideología de lo que el cine debe ser. Un descaro total que ostente dos nominaciones al Oscar.



Sinopsis

Oskar Schell, de 11 años, es un niño excepcional: un inventor amateur, Francófilo y pacifista. Y luego de descubrir una misteriosa llave que le perteneció a su padre, quien murió en el World Trade Center el 11 de septiembre, se embarca en una asombrosa travesía, una búsqueda desesperada y secreta a través de los cinco municipios de la ciudad de Nueva York. A medida que Oskar deambula por la ciudad, se encuentra con un surtido heterogéneo de personas, todos sobrevivientes a su manera. A la larga, la travesía de Oskar finaliza donde comenzó; pero con el consuelo de la más grande de todas las experiencias humanas: el amor


Ficha Artístico/Técnica

Título Original: Extremely Loud and Incredibly Close
Título en Español: Tan fuerte y tan cerca
Origen: EEUU
Año: 2011
Dirección: Stephen Daldry
Actúan: Tom Hanks, Max Von Sidow, Sandra Bullock, Tomás Horn, Zoe Caldwell, Viola Davis y Jeffrey Wrigh
Guión: Eric Roth - Basado en la novela de Jonathan Safran Foe
Fotografía: Chris Menges
Música: Alexandre Desplat
Edición: Claire Simpson
Distribuidora: Warner Bros
Duración: 129’
Género: Drama
Estreno en Bs. As: 23 de febrero de 2012

Publicar un comentario

0 Comentarios